Soplan
vientos del cambio,
silban pidiendo libertad
y sé que este es el momento,
mi penúltima oportunidad.
Dejo que el viento alborote
los restos de mis alas rotas.
Ya no hay miedo al vacío
no puedo aceptar mi derrota.
Y sé que debo seguir
aunque ya no haya Norte.
No puedo volver atrás,
la verdad ya no se esconde.
Miro desde el tejado
las sombras de esta ciudad
fría del gélido viento,
oculta entre la oscuridad.
Y recuerdo buenos momentos
o no tan buenos quizás,
grandes planes inconclusos
y deseos de escapar.
Tú y yo en este tejado
al borde de la gran verdad
imaginando dar el salto,
fantaseando con volar.
Todo comenzó hace un año,
parece más en realidad
con un sueño compartido
y un futuro por crear.
Queríamos pintar las calles,
colorear la realidad,
vivir, aunque fuera a medias,
una vida de verdad
Nosotros ¡Pobres ilusos!
tan esclavos como los demás.
Cambiar
el mundo solo a mediassilban pidiendo libertad
y sé que este es el momento,
mi penúltima oportunidad.
Dejo que el viento alborote
los restos de mis alas rotas.
Ya no hay miedo al vacío
no puedo aceptar mi derrota.
Y sé que debo seguir
aunque ya no haya Norte.
No puedo volver atrás,
la verdad ya no se esconde.
Miro desde el tejado
las sombras de esta ciudad
fría del gélido viento,
oculta entre la oscuridad.
Y recuerdo buenos momentos
o no tan buenos quizás,
grandes planes inconclusos
y deseos de escapar.
Tú y yo en este tejado
al borde de la gran verdad
imaginando dar el salto,
fantaseando con volar.
Todo comenzó hace un año,
parece más en realidad
con un sueño compartido
y un futuro por crear.
Queríamos pintar las calles,
colorear la realidad,
vivir, aunque fuera a medias,
una vida de verdad
Nosotros ¡Pobres ilusos!
tan esclavos como los demás.
hace que todo siga igual.
Soy yo la que he cambiado
y tú el que sigues igual
pero cuando te miro a los ojos
no parecen de verdad.
Tienes la mirada vacía
que tanto odie en los demás,
los mismos ojos cerrados
que ya no quieren mirar.
Parece que todo está bien
aunque todo siga igual,
para ti esto es suficiente
pero yo no aguanto más.
Vivo en una ciudad de colores,
hermosa jaula, quizá.
Y mis cadenas ya no pesan
pero no me dejan volar.
Si he de luchar de todas formas
luchare por mi verdad,
por todas las utopías
que algún día existirán
Si
he de seguir mi camino
lo
seguiré hasta el finalno me basta creer en sueños
quiero soñar la realidad.
Soplan vientos de cambio,
silban pidiendo libertad.
Abro mis alas al aire
y sé que voy a volar.
Mis cadenas son ahora polvo
¿O nunca fueron de verdad?
y mis pobres alas rotas
cubrirán la inmensidad.
Mis pies se levantan del suelo,
amanece al este ya.
Noto el aire en la cara
huele a sal y a libertad.
Mi grito de júbilo resuena
y sopla entre la ciudad,
último verso de un camino
que ahora va a comenzar.
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